Vuelve a recorrer las calles, levantar la esperanza, a orar por la gente (creo que es robar) y a decirles que vienen días mejores para nuestro país (no creeeeoo, será para su bolsillo 💰).
Así comentan en todas partes, luego que el pasado fin de semana, le prestaron las naciones unidas para volver a ser aspirante a la presidencia de la república bolivariana de Venezuela.
Ni siquiera dentro de su propia organización política El Cambio, están de acuerdo con semejante barbaridad.
La cosa de le puso difícil esta vez al guanareño, Javier Bertucci y su gente… definitivamente va rumbo a la quemazón.
El diputado evangélico afirmó que asume «con humildad» y «mucha responsabilidad» ese compromiso a ser un factor que busca la unidad entre todos los sectores del país y de soluciones a la crisis nacional.
“Por las enfermeras y doctores, que ganando tan poco, siguen asistiendo a nuestros hospitales; por todas las maestras, que cobran un pobre salario, pero siguen enseñando a nuestros hijos; estos hombres y mujeres que salen a luchar para llevar un plato de comida a su casa (…) quiero luchar por un país diferente, y soñando con ese país diferente, es que acepto este compromiso y este mandato que hoy me da el partido».
En su discurso dijo que, si existe otro candidato que sea competitivo y que alcance los objetivos trazados -los cuales no mencionó-, declinará sus aspiraciones para darle su apoyo por medio de El Cambio.
«No solo declinaré mi candidatura, sino que voy a apoyar con todas las estructuras y la fuerza que hayamos construido hasta ese momento, todo estará al servicio de ese candidato que pueda lograr los objetivos políticos de este país», aseguró Bertucci.
En desarrollo…