EL News de Venezuela

¿Qué hiciste papaíto?, Por Iván Colmenares

Diosdado Cabello en Acarigua.

No fue lo que dijo en Acarigua, Diosdado Cabello. Fue lo que quiso decir, lo que se llama leer entre líneas, el capitán del odio, en una semana donde la violencia de género, incitación al agavillamiento y las miserias humanas que retratan al vicepresidente del PSUV, al nuevo Comandante de la Guardia Nacional y al gobernador de Trujillo fueron el denominador común del culillo que reina en las cúpulas rojas, cuya sala situacional cerebral debe moverse en centenares de escenarios, porque el mundo cada día se les pone más chiquito.

Creo que la estrategia que vienen usando en cuanto a que, en lugar de concentraciones masivas para el difunto Chávez, que sí tenía masas y mucho dinero para movilizaciones y no se les olvide que la debacle económica venezolana tuvo un grave punto de quiebre cuando en el 2012 se gastaron el presupuesto de un año para la campaña del “invicto”, ese que según el Pollo Carvajal, le ganó sólo a Salas Römer, parece interesante, porque dan sensación de mucha presencia y refuerzan el voto que a ellos les interesa que es el que sienten como suyos, los duros. Y los protagonistas que suben a las tarimas son los jefes de UBCh, CLAP, jefes de calles, que son los dirigentes que reciben beneficios particulares del erario público, y que son usados como perros de caza para atacar a nuestros precandidatos para las primarias.

Varias preguntas se hicieron desde Caracas. ¿Se lanzó Diosdado a la Presidencia? ¿Habló de golpe de estado? ¿Se notaron las diferencias con Maduro y con Cilia? ¿Le van a cobrar la conspiración junto a los Rodríguez contra El Aissami? ¿Está arrecho porque le mandaron 60 generales afectos a él para la casa y le quitaron la cuota que tenía en el alto mando, al ser cambiado el Comandante de la GNB y no tuvo velas en ese entierro? ¿O porque muy pocos de los suyos fueron ascendidos? El segundo a bordo anda inquieto, hiperkinético, nervioso. La vaina era así: Nicolás, Diosdado, Rodríguez, El Aissami. Lo quieren sacar del podio. Pero ahora con el altísimo grado de rechazo de Maduro, andan buscando a Dios por los rincones. Cilia quiere ser candidata, por eso los empeños en coprotagonizar el programa de los lunes del Presidente y no se quiere mudar para La Casona. Nicolasito anda soñando con los procesos cubano y norcoreano, donde los hermanos e hijos suceden a los líderes. Es decir, hay mucha gente con las lombrices alborotadas y en las Fuerzas Armadas, acostumbradas a su tradición, siempre hay gente soñando con poner orden en la pea, aunque el remedio sea peor que la enfermedad.

Yo creo que esta es la pesadilla de Cabello. Aunque se refirió a que ya saben lo que tienen que hacer cuando se aparezca su karma femenino, en el que se le ha convertido María Corina y que ellos mismos con su terquedad que raya en brutalidad han convertido, al disco rayado de las sanciones mientras que ellos se pasean en camionetas de última generación, los demás a duras penas consiguen transporte o reciben una gasolina mala, a las primarias sobre las que pronosticaba hasta hace pocas semanas que no iban, pero que ahora parece que van pero serán según él, una pelea a cuchillos con piña sabrosa, hay frases que con su incontinencia verbal o premeditadamente, enseñan el tramojo.

Dijo que en Acarigua no va a pasar nada, pero que deben estar listos para ir a Caracas en cualquier momento a defender la revolución. Con eso fue suficiente. Las teorías comenzaron a rodar. Las mentes rojas se preocupan y comienzan a sacar cuentas. En un país destrozado en revolución, donde el salario se volvió hace tiempo polvo cósmico, donde las bajas en las Fuerzas Armadas se siguen incrementando aceleradamente y donde el régimen, en plena campaña electoral se desespera por mantener un margen de aceptación, la grave situación económica de la familia venezolana, los problemas gravísimos en los servicios públicos, el tema de la gasolina y el combustible, el hito inverosímil de 4 millones 800 mil viviendas, donde nadie volvió a pegar un bloque, hace que Maduro no pase del 12 por ciento de aceptación.

Y vuelven los cerebros a preocuparse. ¿Qué van a hacer si la caída libre no se detiene y lo que les espera es una paliza electoral a la que no han podido sabotear? ¿Les pasa por la mente un autogolpe? No es de extrañar.

Por ahí deben venir los tiros de Cabello en su discurso acarigüeño. No da puntada sin dedal. Esos mensajes no son para la oposición. Son para Maduro. No se van a dejar enterrar sin pelear. Recordé al icónico narrador de fútbol, Lázaro Papaíto Candal.

Iván Colmenares.

 

 

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