La política social debe ser para dignificar la persona, no para manipularla y hacerla dependiente y esclava de una migaja, por el contrario debe ser un punto de apoyo para apalancar la vida e impulsar la superación de la persona, una política diferente, es actuar con amplitud, sin exclusiones ni discriminaciones partidistas e ideológicas, ni de ninguna otra naturaleza, es respetar el pensamiento, la opinión divergente, critica, la posición contraria, con tolerancia y debatir las ideas con ideas, conceptos, prácticas enaltecedoras de la condición de ciudadanos, la dignidad humana por encima de todo, así haremos un país diferente, una democracia plenamente encarnada en la vida social, política y económica de la nación.
(Tercera parte) Simón Valdez.
