Parte del anhelo de la gran mayoría de los venezolanos es tener calidad de vida, estabilidad económica y laboral. Puntos clave por los que los distintos gremios dejaron a un lado los tintes políticos y se unieron para decir basta a un régimen que se las ingenia con un instructivo como ONAPRE para estafar a la masa trabajadora.
La lucha de docentes y demás trabajadores es un ejemplo que debemos emular para buscar soluciones a los problemas que enfrentamos y conquistar cambios. Es hora de unificar el descontento, de escucharnos como país y luchar juntos sin importar nuestras diferencias, en pro de la reconstrucción de esa Venezuela próspera y de oportunidades que las nuevas generaciones tanto se merecen.